Últimamente son muchos los pacientes que me preguntan qué diferencias existen entre un fisioterapeuta, un osteópata y un quiropráctico, o incluso un masajista. Creo que para el mundo de la fisioterapia está clara la diferencia, pero no tanto para el resto de personas, incluidos algunos compañeros sanitarios. Aquí mi pequeña aportación para intentar aclarar las dudas, es la primera vez que escribo en un blog así que espero que le sea útil a alguien. ¿Qué es un fisioterapeuta? Hay muchas definiciones para determinar qué es un fisioterapeuta, una de ellas la dio la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1958. Según la OMS, la fisioterapia es "la ciencia del tratamiento a través de: medios físicos, ejercicio terapéutico, masoterapia y electroterapia. Además, la fisioterapia incluye la ejecución de pruebas eléctricas y manuales para determinar el valor de la afectación y fuerza muscular, pruebas para determinar las capacidades funcionales, la amplitud del movimiento articular y medidas de la capacidad vital, así como ayudas diagnósticas para el control de la evolución". ¿Qué quiere decir esto? Pues que es el fisioterapeuta está capacitado para aplicar todas estas terapias: no sólo damos masajes sino que podemos aplicar técnicas válidas y necesarias en áreas tan específicas como la neurología o la respiratoria, pasando por cardiología y sin olvidar nunca el sistema músculo-esquelético, sobre todo con ejercicio terapéutico y medios físicos. También somos capaces de diagnosticar nosotros solos. Todo ello gracias a los conocimientos adquiridos a través de la formación universitaria, actualmente de cuatro años en nuestro país. Entonces ¿qué es un quiropráctico?, ¿y un osteópata…? Un quiropráctico es una persona que trabaja específicamente en el sistema músculo-esquelético del paciente con el fin de corregir sus problemas en el sistema nervioso y el músculo-esquelético, así como los efectos que estos problemas acarrean en su salud. El tratamiento no requiere cirugía o fármacos. Muchas personas asocian los quiroprácticos con el trabajo en la columna. No obstante, ellos se dedican al sistema músculo-esquelético. La osteopatía tiene un enfoque asistencial diferente: parte de un sistema de diagnóstico y tratamiento específico para incidir en la estructura del individuo y en los problemas mecánicos que pueden aparecer. Fue desarrollada por Andrew Taylor Still y se basa en la creencia de que huesos, músculos, articulaciones y tejido conectivo no sólo tienen la función evidente de formar parte de nuestro cuerpo, sino que desempeñan un papel esencial en el mantenimiento de la salud. Centran su praxis en el tratamiento de los tejidos blandos: buscan liberar la energía atrapada en los músculos mediante manipulaciones. ¿Dónde está el problema?: las maniobras pueden ser tan eficaces como cualquier otra. El problema no es la técnica sino que, en España, dichas áreas de conocimiento -quiropraxia y osteopatía- son propias del fisioterapeuta, el único que legalmente puede practicarlas.