Colocación, inmovilización y rehabilitación suele ser el proceso para recuperarse de una dislocación de hombro.
La dislocación de hombro se produce cuando las superficies articulares se separan completamente. El hombro es una de las articulaciones más vulnerables ya que pese a que se caracteriza por su amplia movilidad, cuanta mayor movilidad gana más estabilidad pierde. La causa de dislocación más frecuente suele ser debido a un traumatismo, por lo que se debe prestar especial atención a tendones, músculos y ligamentos que también han podido sufrir daños. En el caso de pacientes de fisioterapia neurológica, la hemiplejia causa una reducción importante del tono muscular y esta situación prolongada normalmente se convierte en una dislocación. El primer paso para el tratamiento de esta lesión es la colocación de la articulación y su posterior inmovilización. La fase de recuperación permite la recuperación de los tejidos blandos que dan estabilidad a la articulación. El tiempo de inmovilización depende de la edad del paciente y de los daños colaterales de la lesión. El tiempo máximo de inmovilización del hombro no debería superar las cuatro semanas Tras la inmovilización, se procede a recuperar el movimiento de la articulación con la ayuda de un fisioterapeuta, fase que puede durar entre tres y seis meses. Para conocer el grado de movilidad del hombro, el fisioterapeuta mide la amplitud de los movimientos comparados con los movimientos del hombro sano. La movilidad del hombro se recupera de forma gradual con movimientos activos y pasivos dirigidos por el fisioterapeuta, aunque puede resultar doloroso resulta necesaria la colaboración del paciente con el fisioterapeuta para favorecer la recuperación. Los arcos de movimiento se suelen recuperar a los 3 o 4 meses, si pasado este tiempo no se ha recuperado la movilidad total, es recomendable una visita al traumatólogo. Para recuperar totalmente el hombro, se debe trabajar la potenciación de todos los grupos musculares para evitar la atrofia muscular. Además, si el paciente practica deportes en los que el hombro está involucrado, se debe realizar una rehabilitación específica para preparar al hombro para este deporte. Esta rehabilitación incluye la potenciación específica de grupos musculares, el refuerzo del sentido de la propiocepción y los niveles de confianza perdida en el uso del hombro.